La decisión de construir un espacio propio sea personal o comercial es sin duda uno de los momentos más trascendentales en la vida de muchos ya que esto combina no solo la ilusión de un nuevo proyecto, sino, además, compromiso financiero y una alta planificación. Lo cierto es que, a diferencia de comprar algo ya terminado, el construir desde cero permite la posibilidad de crear un espacio completamente personalizado a nuestros gustos, donde podemos ser parte de todas las decisiones y crear ese espacio con el que siempre soñamos. Sin embargo, también es necesario reconocer que antes de comenzar, se necesita de una preparación especial que determinará el éxito del proyecto completo. Para esto, lo ideal es tomar los servicios de expertos, ya que ellos son quienes conocen los aspectos esenciales a considerar que pueden llegar a marcar la diferencia entre una construcción óptima y una que requerirá de muchos arreglos. A continuación, te contamos un poco más sobre todos esos aspectos que debes de tomar en cuenta para poder construir el proyecto que tienes en mente y que el proceso sea de lo más ligero:
Una evaluación de las finanzas es clave para empezar
De los primeros pasos es analizar las finanzas. Nos guste o no, una construcción se definirá en gran parte, por el tipo de presupuesto con el que se cuenta, por lo que el primer paso consiste en realizar un análisis financiero realista. La realidad es que muchos proyectos suelen enfrentar dificultades no por falta de recursos para construir, sino porque no existe una buena planificación financiera. Para evitar esto, lo ideal es determinar cuánto capital se tiene disponible para empezar a construir y además, determinar un porcentaje mensual que puede destinarse a la construcción sin que afecte la estabilidad económica familiar.
Ahora bien, otra posibilidad es también recurrir a otros medios como financiamiento bancario o un préstamo de terceros. Para esto, lo ideal será considerar los ingresos familiares y en base a ello, determinar cuál es la opción más rentable. En este aspecto, es necesario comparar las tasas de interés, los plazos y los requisitos entre las diferentes instituciones financieras para así, elegir aquel préstamo que se acomode mejor a lo que necesitamos.
El presupuesto también es parte esencial de la construcción
Cuando ya se tenga el monto que puede ser destinado a la construcción, es momento de comenzar a hacer un presupuesto. Dentro de este, es esencial que se detallen absolutamente todos los gastos involucrados, desde el más pequeño hasta el más grande. La realidad, es que muchos presupuestos no incluyen los costos más bajos, sin embargo, al final de la obra uno puede darse cuenta de que la suma de estos costos pequeños resultó en una cantidad exorbitante que no estaba contemplada desde un inicio. Es por esto, que este presupuesto debe incluir desde el costo del terreno si aún no se posee, el coste de los estudios técnicos en caso de que existan, el trabajo de arquitectura, permisos, licencias, materiales de construcción, mano de obra, y más.
Una vez que se tenga un presupuesto detallado de los gastos, es momento de incluir el margen de contingencia, esto porque en cualquier momento los costos pueden incrementar debido a la economía global o la recesión, por lo que un margen de contingencia puede ser clave para mantenernos siempre en el campo seguro y saber que tenemos el dinero necesario para la construcción. Esto evitará estrés y te protegerá contra imprevistos y evitará que el proyecto entre en pausa por falta de recursos.
Toda planificación requiere de un cronograma
El proceso de construir cualquier tipo de espacio no es algo rápido y sencillo. Es importante, que antes de comenzar, se tenga consciencia de esto, y que en base a esto también se pueda comenzar a planificar en cuánto tiempo el proyecto podrá ver la luz del sol ya que esto podría tomar meses o años. De esta forma, se tendrá una idea clara, y no existirá la necesidad de tener que apresurar el proyecto, ya que, en ocasiones, esto puede causar que la obra no se concluya de manera correcta. En términos generales, puede que solo la etapa de planificación previa sea de un periodo de tres a seis meses, y ya después deberá de discutirse con la empresa constructora para que te ayude a ver el panorama real de la construcción en base a los permisos necesarios, el diseño del proyecto, los presupuestos, materiales y más. Lo importante, es tener paciencia para así tener buenos resultados, ya que apresurarse en esta fase inicial frecuentemente genera errores costosos y retrasos mayores.
Tomate el tiempo de elegir una buena empresa constructora
Al final del día, es la empresa constructora quien se encargará de hacer realidad y construir aquello que tienes en mente por lo que es uno de los aspectos más importantes a tomar en cuenta antes de comenzar. Es por esto, que el proceso de seleccionar la empresa que materializará el proyecto es una de las decisiones más críticas del proceso. En este punto, no solo debemos de basarnos en lo económico, sino va mucho más allá. Es clave investigar la trayectoria de las empresas, solicitar referencias e incluso si es posible visitar obras terminadas o en ejecución. Todo esto, te permitirá tener una visión más amplia de cómo trabaja la constructora, si te gustan sus resultados y si se alinea con lo que estás buscando. Además, no olvides de asegurarte que contar con una empresa constructora confiable y legalmente establecida para así, poder protegerte ante cualquier tipo de eventualidad.